Patricia Tapia Gutiérrez

Zitácuaro, Mich.-Patricia Tapia Gutiérrez, es una mujer zitacuarense que ha emprendido una campaña de ayuda a personas en situación vulnerable, desde hace aproximadamente 15 años.

Se ha encargado de gestionar ayuda, como medicamentos, a los enfermos con insuficiencia renal o bien que tienen otras enfermedades sumamente complicadas, como cáncer.

A lo largo de este tiempo ha visto por las necesidades de personas en extrema pobreza y que por su condición económica se ven imposibilitadas a comprar sus medicinas para subsistir.

Ella considera que cada ser humano es una persona valiosa y que merece tener amor, abrigo y seguridad. De tal manera que, destaca que hay una comunidad de personas que no son tomadas en cuenta; sin embargo, les brinda su corazón, sea cual sea su condición social.

Así que se dio a la tarea de ser diferente, mirando a los invisibles, como el anciano abandonado, la mujer viuda, los huérfanos, las madres solteras, los enfermos y familias vulnerables.

“Me dije a mí misma que tenía que hacer algo por ellos, para que dejaran de ser estos seres invisibles. Es como un grano de arena en el desierto, ya que son muchos, pero sé que haré la diferencia en muchos de ellos”, explicó.

“Rescatando un amigo”, tituló así a una campaña de ayuda para familias del medio rural entregando ropa para vender y unas cobijas, así mismo gestionó despensas de manera mensual.

Fue en diciembre pasado cuando llegó a la comunidad llamada El Campamento, donde entregó ropa, para que las personas la pudieran vender, de tal manera que generaran ingresos. En total fue una decena de familias apoyadas.

Se encargó de poner en marcha la campaña titulada “En espera de un milagro”, misma que consiste en apoyar a enfermos de insuficiencia renal, a quienes se les buscó el apoyo de agua para diálisis, así como vacunas de eritroproyectina y otros medicamentos a enfermos que requerían de hemodiálisis.

De igual manera se encargó de visitar las casas de aquellas familias que tuvieran pacientes con cáncer, enfermos del hígado, tiroides y otros padecimientos.

Patricia Tapia acudió a la tenencia de San Felipe de los Alzati, donde se brindó ayuda a una familia que requería de un frasco de albumina humana y el costo de cada frasco es de 700 pesos. El tratamiento fue de 4 frascos al día. De igual manera visitó a una persona que requería ayuda debido a su padecimiento,  cáncer de pulmón.

Con la ayuda del grupo “Soldados de Cristo”, Ministerios Bethel, la empresa Masisa y algunos ciudadanos, se logró ayudar a una mujer de nombre Hilda, vecina de San Felipe, enferma de insuficiencia renal y en extrema pobreza, para que tuviera un lugar digno donde vivir.

Algunas familias de localidades, como Rincón de Ahorcados, Guanoro, San Felipe, Aputzio de Juárez, San Andrés y Colonia Nueva, han hecho llegar su agradecimiento a la mujer zitacuarense por ayudarlos a cubrir sus necesidades.

Le han expresado su gratitud por haber acudido a las diferentes instancias, ya fueran de gobierno o privadas, para buscar ayuda.

De igual manera ella ha buscado apoyo a través de un grupo de Whats App, llamado “En espera de un milagro” y concientizar a las personas para generar mecanismos de ayuda más rápidos.

Han sido diversas las necesidades que hay en este municipio, puesto que muchas familias carecen de recursos económicos para atenderse de sus enfermedades y que, la mayoría de ellas, representan un costo económico elevado.

“La labor social que ella ha realizado por nuestras familias ha sido de gran ayuda, desde hace años ha gestionado apoyos. La reconocemos como mujer valiosa que es y gran ser humano”. Escribieron así en una carta hecha a Tapia Ramírez por su aportación y tiempo dedicado a ayudar de manera altruista en sus comunidades.