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Pueblos indígenas, la deuda que sigue pendiente

Pese al ejemplo que dan las culturas indígenas para una búsqueda del orden, aportar en seguridad, heredar cultura, además de su marcado llamado a ser tomados en cuenta, en Michoacán la deuda continúa con las poblaciones que fueron base para la entidad; incluso, lejos de impulsarse, pareciera que “les ponen el pie”.

La conmemoración del día mundial de los pueblos indígenas, en este pasado 9 de agosto, permite enmarcar las reflexiones de recientes hechos para observar en qué posición se deja a la comunidad indígena de la entidad.

PANORAMA INDÍGENA

A nivel mundial, documentos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), afirman que hay población indígena en 70 países y otros, de la misma ONU, dicen que en 90. En lo que coinciden todas las fuentes de Naciones Unidas, es que son alrededor de 370 millones de personas indígenas, distribuidas en 5 mil grupos distintos que hablan más o menos el mismo número de idiomas.

En México, las fuentes oficiales señalan que hay un total de 68 comunidades indígenas habitando en el territorio nacional, y los que concentran la mayor cantidad de habitantes son los Nahuas, Mayas, Zapotecos, Mixtecos, Tzotzil, Otomís, Tzeltales, Totonacas, Mazatecos y Mazahuas.

En Michoacán los grupos indígenas que habitan son principalmente Purépechas, Mazahuas y Otomís, además de Matlatzincas, que son descendientes de los purépechas. Según datos oficiales en Michoacán 117 mil 221 personas hablan lengua Purépecha, nueve mil 170 el Náhuatl y cinco mil 431 el Mazahua.

Desde 1994, la ONU aprobó el 9 de agosto fuera conmemorado a nivel mundial como el día de los pueblos indígenas. Esta fecha, pero de  1982, fue cuando se realizó la primera reunión del Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indígenas de la Subcomisión de Prevención de Discriminaciones y Protección a las Minorías. Es decir, se trata casi del día en que la ONU aceptó o se dio cuenta de que había indígenas en el planeta.

GUARDIANES DE LA NATURALEZA

La propia ONU, además de recalcar que la población indígena en el planeta representa el más del 5.0% de la población mundial, reconoció que se trata de un sector de personas que se encuentran entre las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables. Pero al mismo tiempo destacó que estos grupos son los guardianes de la biodiversidad que hay en el planeta.

“Celebremos su rol como guardianes de la biodiversidad del planeta. #SomosIndígenas”, publicó en su cuenta oficial de Twitter del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

Estos pueblos han heredado y practican culturas y formas únicas de relacionarse con la gente y el medio ambiente. Además tienen rasgos sociales, culturales, económicos y políticos que son distintos de los predominantes en las sociedades en las que viven.

En Michoacán, el ejemplo obligado es el de Cherán, donde un movimiento de autonomía se inició a partir de la intención de evitar la tala ilegal de sus bosques.

Las campanas de la iglesia sonaron desde muy temprano, la mañana del 15 de abril de 2011. Pero no se trataba del habitual llamado a misa, sino que esta vez convocaban a los habitantes de Cherán a un asunto de suma urgencia. Había que cerrar todas las entradas y salidas del pueblo para evitar el paso de camiones que, un día sí y otro también, transportaban troncos de árboles de pino y encino, extraídos de los bosques pertenecientes a Cherán.

Seis años han transcurrido y desde entonces, aunque no de manera total, si en una medida destacada, se ha disminuido la tala clandestina

BÚSQUEDA DE ORDEN Y JUSTICIA, AGRESIONES COMO RESPUESTA

Es necesario en este punto recordar que en 2015 las comunidades de Nahutzen y Sevina se vieron envueltas en una controversia que llegó hasta enfrentamientos. La petición de que se aclararan los límites de tierras de ambas comunidades se omitió y los ánimos llegaron hasta los enfrentamientos violentos. Fue esta la única forma en que las autoridades intervinieron.

El gobierno que encabezó Fausto Vallejo Figueroa había hecho oídos sordos a este conflicto por más de un año, hasta que se dieron los enfrentamientos violentos, finalmente se avocaron a su mediación.

En febrero de este año, pobladores de la comunidad de Caltzóntzin y policías estatales protagonizaron una gresca, que se derivó de las manifestaciones por la exigencia el pago de la indemnización por los terrenos que utiliza el municipio de Uruapan para la celebración de la Expoferia.

El resultado de esto fueron 13 personas detenidas y un policía lesionado, 12 de los arrestados lograron ser liberados hasta junio con el pago de una fianza.

También en este año, los desencuentros entre los habitantes de Arantepacua y Capácuaro se agudizaron y  las medidas de presión al gobierno para la solución de estas discrepancias desencadenaron en una agresión de policías a los habitantes de Arantepacua, en abril de este año, donde hubo la muerte de cuatro comuneros desarmados. Un hecho que al día de hoy aún no tiene total claridad y por el que se sigue exigiendo justicia.

PRESUPUESTOS COMO FORMA DE MANIPULAR

La asignación y ejecución de recursos públicos se había mantenido como una forma de condicionar y manejar a los pueblos indígenas; pero a partir del ejemplo de Cherán, que inició su autodeterminación, otras comunidades vieron el camino, pero la clase gobernante no ha visto esta acción buenos ojos.

El ejemplo más reciente es Pichátaro, en donde el ayuntamiento, con asesoría del gobierno estatal y el Congreso del Estado, buscó por todas las vías posibles impedir que la comunidad hiciera uso de sus derechos para ejercer directamente el presupuesto que le corresponde dentro del municipio de Tingambato, esto pese a que incurría en desacato judicial al respecto.

Pero finalmente el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación avaló el reclamo indígena, de poder manejar en forma directa el presupuesto que le corresponde del municipio de Tingambato.

Le siguió Santa Fe de la Laguna, tenencia de Quiroga, pues el pasado 27 de junio el Tribunal Electoral del Estado de Michoacán dio luz verde a su independencia financiera; con lo que, a partir del resolutivo, el Ayuntamiento de Quiroga dejará de administrar el recurso que le corresponde a la demarcación.

Este ejemplo ha sido seguido ya por al menos 30 comunidades originarias que integran el Consejo Supremo Indígena de Michoacán y que ahora buscan proclamar su autonomía frente a los municipios, a partir de la conformación de un Consejo Comunal.

FALTA DE LEYES, ARRIESGA AUTONOMÍA

Pero a pesar de estos logros, hay un “descuido”, que quizá hasta podría ser doloso, lo que también capitaliza el desinterés de un Congreso del Estado por respetar la voluntad de las comunidades indígenas.

Michoacán es una de las seis entidades del país que carece de leyes reglamentarias en materia indígena, junto con Baja California Sur, Coahuila, Jalisco, Sinaloa y Tamaulipas.

En Oaxaca, por ejemplo, existen cuatro normas específicas: la de Derechos de los Pueblos y Comunidades Indígenas del Estado de Oaxaca; la Orgánica de la Procuraduría para la Defensa del Indígena; la Ley Que Crea La Academia Oaxaqueña De Lengua Mixteca; y la Ley que Crea la Academia de la Lengua Zapoteca.

El Magistrado del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán (TEEM), Ignacio Hurtado García, explicó recientemente que tras las resoluciones que determinan autonomía a comunidades sobre sus recursos, que se requiere legislación sobre cómo transferir los recursos, quién los recibe y cómo los deberá comprobar ante la instancia federal, estatal o municipal, según sea el caso.

Al Magistrado le preguntaron: ¿Existe riesgo de que por la falta del ordenamiento legal las comunidades indígenas incurran en omisiones administrativas que deriven en perder el derecho ya ganado?

Su respuesta fue: “Puede ser. Hay dos temas ahí y es muy probable, sí es posible. Es uno de los temas que nosotros impulsamos, porque sí hay cierta preocupación; es cierto que hay un derecho, pero también tenemos que armonizar ese derecho con el de la obligación de transparentar y rendir cuentas, y ahí es donde tienen que entrar las otras autoridades para coadyuvar con ellos”.

 

Así, las pretensiones, logros y luchas indígenas son omitidas, desvirtuadas o incluso boicoteadas por la clase política, llegando incluso a los conflictos y muertes sin justificación, las comunidades originarias en la entidad se percatan de ello y no quedan conformes, en Michoacán se opaca el festejo de los pueblos indígenas.

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