Despertar de la tierra 

Autor:​​​​​José Luis Valencia Castañeda

La tierra es un organismo vivo

¿Hemos avanzado en nuestro desarrollo como humanidad de la misma manera técnica y espiritualmente? Mi percepción es que sí se ha avanzado, pero diametralmente opuestos los dos polos. Solo en un pequeño grupo, de seres que están separados de las grandes masas, se ha avanzado espiritualmente. El común o la muchedumbre no le interesa eso, a ellos les interesa el desarrollo técnico, no le preocupa el desarrollo espiritual, ni le preocupa el desarrollo propio, es apático a todo aquello que suene a filosofía e introspección, no le gusta trabajar en sí mismo, es flojo y se da miedo, no sabe qué demonios encontrará atrapados en su subconsciente.

Ese personaje irá navegando las aguas como se las ponga el sistema, pues el sistema trabaja para mantenerlo ocupado en cosas triviales, para que no piense… el sistema piensa por él… si le mandan tormentas, las sorteará, y se lamentará, pero seguirá soportando las crecientes aguas. Si les mandan felicidad, alabará a su buena fortuna, se alterarámucho con eso y considerará que la vida es buena;si le mandan dolor, lo aceptará como un designio del destino o del dios que le enseñaron a adorar. Así lo preparan para aceptar todo aquello que le llegue de la ciencia y la técnica sin cuestionar, tal y como la fe exige. 

Dirá que somos modernos porqué tenemos artilugios que así lo prueban, dirá que se ha desarrollado porqué cuenta con la parafernalia que el mercado le vende, aunque en el fondo sabe que un teléfono no lo hace libre ni inteligente, es una forma de esclavitud. La libertad está en saber integrar a tu mente el conocimiento. Así que es útil si lo usas de manera positiva hoy, y contar con unteléfono te hace sentir que estas en armonía con los tiempos, pero cuando te preguntan si sabes el verdadero destino del aparato, ¿El fin último? No sabrían responder, si podrían responder a preguntas más humanas, como: ¿Qué es la tierra?, ¿Podrían acaso definirla? 

Es muy probable que haya alguien que sí, pero las mayorías solo identifican el concepto más machucado por la población, la tierra es definida como la “parte sólida del planeta que no está cubierta por agua”, y no es precisamente correcto, aunque sea el más aceptado socialmente. Ahora, con la liberación de la información de manera global y extensa, entendemos que la tierra es algo más grande, es mucho más que un simple cascarón sólido rodeado de agua. La tierra es un ser vivo, es un ser espiritual, es la madre acogedora que permite la existencia de la vida como la entendemos. Para entenderla, se han hecho muchos intentos en laestructuración de una tierra viva, identificándola como un supe organismo simbiótico.

Entre esos estudiosos está James Lovelock, un científico que incursionó en la química, electrónica y sistemas complejos, diseñador de instrumentos de medición, asesor de la NASA. En sus trabajos intentó identificar vida en otros planetas, donde comparaba la composición de las atmosferas de otros planetas con el nuestro. Su propuesta es que en las atmósferas es donde se puede encontrar el rastro más preciso de vida. Desde luego, estamos de acuerdo con esa parte de la concepción, ya que no solo podemos asegurar que hay signos de vida en las atmósferas.

Estamos seguros que lo hay en todas las manifestaciones físicas que se puedan observar y las que aún no están registradas por la ciencia; en las atmósferas, en el espacio que decimos vacío, en los planetas, dentro de los planetas, las mismas rocas son seres vivos, con una línea de tiempo distinta a la nuestra, es tan larga, que no la entendemos, porque vemos muy poco de sus procesos vitales ¿Pero? ¿Por qué no se considera a la tierra como un ser vivo? ¿Y se le da el tratamiento como tal?, ¿Por qué somos seres soberbios y homocentristas? Creemos que el hombre es el alfa y el omega de la creación, ¿En él nacen y mueren las virtudes y los defectos?

Al parecer es gracias a las mentes que ven a la materia como el único fin de la vida, y son mayoría. Esa tergiversación del concepto vida en la tierra, es lo que ha provocado la desviación de la atención enla importancia que tiene la tierra para el hombre mismo. Si este sólo se centra en él hombre mismo, la tierra pasa a segundo plano. El craso error es que el hombre no se considera un organismo dentro de la pirámide vital de la tierra, se considera un serúnico y con el poder se estar encima de los demás y usa ese “poder” a discreción, disponiendo de la vida de los demás seres como si les perteneciera, y la vida solo se pertenece a sí misma, se autorregula, algo que los científicos aún no saben cómo expresarlo.

Por ejemplo, Lovelock, después de una serie de estudios, mediciones y observación de la interacción entre la materia viva y la inanimada,propuso la hipótesis de Gaia, que supone que la atmósfera, los océanos, el clima y la corteza de la tierra se encuentran ajustados en un estado adecuado de vida. Algo lógico para los que estudian al espíritu de la tierra llamado Gaia, pues entienden que la tierra como organismo vivo, con alma y espíritu, tiene ordenadas y bien establecidas todas las tareas que permitan la continuación de la vida conforme van desarrollándose los conocimientos y la tierra va elevando su frecuencia vibratoria en conjunto con el universo llamado Nevado, al cual pertenece, y el hombre es solo un peón más de esa vida.

Cierto que es de los más importantes, pues es el único que tiene cuerpo, alma y espíritu dentro de un mismo ser y este ser tiene 9 clones, y muchos yoes en todos los tiempos y en todas las dimensiones, acorde a su propio desarrollo. Va adaptándose pues el hombre y la tierra a las condiciones de su propio desarrollo, como le comenta Lovelock. 

Los mismos organismos vivos propician las condiciones que necesitan para la vida, y la tierra como organismo vivo propicia sus propias condiciones, por ejemplo: la temperatura, el estado de oxidación, la acidez, las propiedades de las rocas, las aguas, las plantas, los animales y el mismo ser humano mantienen más o menos constantes las condiciones óptimas para la vida en cualquier época, en cualquier condición. Todo ello permite la perpetuidad de la vida, que se manifiesta distinta para los seres, pero lineal y única para la tierra.

Todos los seres vivos dentro y fuera de la tierra viven en constante homeostasis, obtenida mediante procesos cibernéticos que se llevan a cabo de manera automática e inconsciente por la biota. Desde luego esta concepción es meramente técnica, nada se da de manera inconsciente, todo tiene un plan para el ejercicio de la vida, la vida misma es un ejercicio para otro tipo de vida, el que llaman “vida después de la muerte”, que es la transformación de la energía que somos con las limitantes físicas, a la energía que somos sin ella, o sea espíritus libres de navegar por todos los mares de lo consciente e inconsciente, por todos los cielos o universos.

Lo que, si nos debe quedar claro, que la tierra no se entendería sin la comunión de todos los seres vivos que la conforman, como el ser humano no se entendería sin la comunión de todos los seres vivos que lo conforman. El cuerpo humano es un equipo de trabajo muy preciso, millones de seres unidos para formar a un ser superior, el primer ejemplo de una deidad física, el hombre es el dios de todas sus células y organismos, como la tierra es el dios de todos los seres que la habitamos, como Nevadón es el dios de todos los planetas como la tierra, es una jerarquía precisa, constante y firme, es un sistema perfecto, porqué hasta la muerte tiene su belleza.

No se entendería a la eternidad si en ella está el mismo hombre, con las mismas ideas, con las mismas pretensiones, sería extender la estupidez al infinito, y a nadie le gusta cometer los mismos errores, pues los errores traen consigo una carga energética negativa muy fuerte; con dolor, tristeza, desesperación y desanimo.

Por eso la vida se diseña para ser vivida en el aprendizaje significativo, para que llegues, aprendas y te retires, y cuando necesites aprender algo nuevo, regresas en un nuevo cuerpo, con mejores condiciones de vida, tal y como lo podemos ver en nosotros mismos, no seríamos lo que somos sin haber aprendido a hablar, a caminar, a escribir, a leer, a entender los mensajes del entorno, sin entender a los que nos rodean, sería fútil venir a esta vida con la sola idea de que la vida es una y se termina, pero también es fútil pensar que podríamoshacer eternos nuestros errores. Gaia, el espíritu de la tierra no lo permitiría, por su propia salud.

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