Despertar Poético

 

Autor:​​​​​José Luis Valencia Castañeda

Hasta los malos son buenos

Aún no podemos entender del todo la dualidad que se maneja en esta tierra. Las desigualdades, las inconsistencias y las incongruencias aún no nos son del todo claras, pero paso a paso vamos descifrando el origen y destino de nuestra humanidad: podemos entender que exista algo de desigualdad en las relaciones sociales, debido al nivel de educación e integración de ciertas razas al concurso económico. Lo que significa que aquellos que no se esfuerzan en mejorar indefectiblemente tendrán que sufrir limitaciones. Pero las demás personas que se enfuerzan día a día, no deberían sufrir. Eso sería lo lógico.

Pero el universo no se maneja así, pareciera que hay otras reglas que deben ser consideradas. Por ejemplo, Elon Musk, un ser que aparentemente no tiene educación formal, sin títulos, sin carreras universitarias de renombre, sin invertir millones de pesos en educación que le diese cierto estatus social, como sucede con las mayorías que pagan por ser parte de un selecto grupo que se puede dar el lujo de separarse del lumpen, ha logrado formar un imperio enorme con recursos casi ilimitados.

Eso, desde luego, nos genera ciertas sospechas, que algo en el universo no funciona con esa justicia, y eso nos hace buscar una línea de información distinta, ¿Cómo pueden esos seres lograr imperios casi de la nada? Podríamos compararlo con Steve Jobs, Bill Gates o Mark Zuckerberg, todos ellos crearon imperios prácticamente sobre las rodillas y millones de seres simples inclinamos la cerviz ante sus potestades. Así que el misterio parece enfocarse más a la adquisición de información por medios no convencionales. 

En uno de los portales que abundan en la red mencionan que Elon Musk pertenece al grupo de la élite oscura, lo que antaño diríamos que vendió su alma al diablo, y algo hay de eso. En este universo y en esta dimensión existe la dualidad, la oscuridad está plantada frente a la luz, la ignorancia está plantada frente al conocimiento, más la adquisición  del conocimiento mediante el esfuerzo es lo que da tranquilidad y paz, mientras que la adquisición del conocimiento mediante algún contrato oscuro produce dolor y ansiedad, y estos seres viven estresados, pero se presentan ante nosotros con fortalezas infrahumanas.

En esos portales se menciona que Elon Musk ya fue advertido de retirarse de la influencia de los entes oscuros, que se reconocen como los Iluminati y los masones, porqué corre peligro su vida, y no nos extrañaría que Musk, ya extasiado por el poder, podrido por el poder y la ambición, no se retire a tiempo y muera, como le pasó a Steve Jobs, que murió lamentándose de no poder salvar su vida a pesar de la riqueza económica que poseía. Evidentemente podría haber salvado su vida si hubiese seguido el guion que había contratado, que era salirse del círculo del poder y fama en el que había entrado, movido por la ambición.

Los que poseen muchos recursos, tienen los problemas inversos a los que padecen el mal de la pobreza material. No sabemos cuál de los dos sufre más. Quizá Jobs hubiese deseado llegar a los 90 años vivo, con cabal salud física, limitado de recursos económicos, quizá. Quizá el méndigo de la esquina hubiese querido morir a las 40, rico y no pobre a los 60. Algo común en la cultura del narco, que prefieren vivir ricos un año, que toda una vida pobre, y quizá tengan razón, las experiencias del dolor en ambos extremos debe ser dura.

Luego entonces, ¿La maldad existe en grandes cantidades en las zonas ricas o en las zonas pobres? ¿Dónde hay más maldad?

Entendemos que la maldad existe únicamente en el ser humano, que es quien está experimentando todas alas emociones en este plano, por lo tanto, existe en ambos hemisferios, pero es más fuerte en donde existe más poder económico. En este plano es más fácil corromperse con el dinero que sin él. Aquellos que adolecen de pobreza no sufren por el poder, muchos solo quieren vivir, pero también sufren por la indolencia, por la falta de empuje y ánimo, contrario a los poderosos, que sufren por mantener su estatus. Solo que los contratos que tienen, los mantienen hundidos en el dolor a ambos.

Los pobres, por razones más simples, bien podrían haber redactado contratos más benéficos, y no lanzarse a sufrir innecesariamente y menos dejarse engañar por los jueces corruptos, o bien podrían haber conectado con la divinidad para deshacer sus contactos y pactos con la oscuridad. Aunque viendo las cosas desde un punto de vista frío, la maldad es necesaria muchas veces para poder despertar del letargo en el que estamos metidos, muchos de los seres humanos bien podrían hoy identificar todo el engaño en el que está metido, pero su mente aún no entiende el engaño, todavía está esperanzado en que todos los seres que lo esquilman le son necesarios. Bastaría con romper los contratos y los pactos.

El abuso de la oscuridad sobre la mayoría de la población es brutal, entendemos que, si la verdad sobre todo lo escrito y lo dicho por las “autoridades mundiales” saliera a la luz de golpe, muchos no la soportarían. Imagínense a todos aquellos que se desgarran las vestiduras frente a un altar, ante la voz de algún personaje que se autonombre pastor, cordero o cura y que de pronto llegue una autoridad más grande y que la reconozca y le diga que todo en lo que ha creído durante toda su vida es una vil mentira, que no existe tal dios, ni tales santos y que su libro no es tan sagrado como se lo han hecho entender, su vida se derrumbaría, y deambularía, pues el pilar que lo sostiene espiritualmente ya no existiría, se sentiría vacío, navegaría las olas sin un sostén, sin siquiera mover las manos que le salvarían si nadara.

Pues así pasará un día, y no falta mucho tiempo antes de que se desmorone toda la mentira, caerán gobiernos, caerán religiones, caerán grandes imperios de la salud y los alimentos, caerán los imperios de la educación, la historia se desvelará. Sería conveniente irnos preparando. Quizá no suceda en nuestro tiempo, si estamos más allá del bien y del mal en la edad, pero sucederá algún día, en el tiempo de nuestra descendencia.

Vemos como paso a paso todas las ideologías se desmoronan, los grandes líderes están cayendo en desgracia, por perversiones que ya no pueden ocultar, porqué las han venido practicando desde el mismo día de la creación de su grupo o iglesia, vimos como el llamado apóstol de la iglesia la Luz del Mundo fue juzgado en la tierra, no es menester hacerse una imagen de lo que sucederá en el noveno círculo del infierno señalado por Dante, y no es que creamos en la existencia del cielo o infierno cono sitios físicos llenos de bondades o suplicios, no, pero si creemos que en el equilibrio de la existencia energética y espiritual, nada se queda sin justicia. La justicia divina siempre llega.

Tampoco me quiero imaginar a los encargados del karma juzgando al padre Maciel, y ahora que se acerca el juicio del Dalai Lama… un pervertido más que pronto caerá, y con él todos aquellos ciegos que una vez le hayan abierto los ojos, ellos mismos se lanzarán a los abismos de la locura por no soportar el daño que han hecho inconscientemente, involuntariamente o por estar cegados por la fe. 

Todos aquellos que están en la oscuridad y que han hecho pactos como Musk, es hora de regresar a origen, hay que romper con la oscuridad. Al final, la oscuridad, las elites, los grupos oscuros son necesarios para ponernos a prueba, si ya la pasaste, si los identificas y vives en relativa calma, estas del otro lado, has alcanzado el séptimo cielo. Tu encargo ahora es ayudar a aquellos que están ciegos, principalmente a los que están siendo engañados, gracias a su carácter bonachón.

A todos aquellos que han sido engañados y siguen creyendo en un destino trazado por el dios supremo y las estrellas, que son solo el reflejo de los soles de otros universos paralelos, que podemos empezar a intuir, ni siquiera son esféricos, solamente son platos o planos o planetas como gusten identificarlos, alineados en un plano enorme, que aún no entendemos, pero que empezamos a identificar como un gran teatro donde actúan grandes personajes que te prueban cada día en tus emociones.

Levántate de tu asiento, camina hacía el escenario, levántale las faldas al telón, sube a la tramoya y cuélgate de los hilos. Es mejor empezar a mover tus propios hilos a permitir que cualquier inútil lo haga por ti, abusando de su información. Toma consciencia de tu poder, de lo que eres realmente, conéctate contigo mismo, así estableces conexión con la divinidad, que tú mismo eres y el cielo estará límpido frente a ti. Los oscuros te temerán.

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