Las barreras contra la libertad

P. Agustín García Celis

En la sociedad hay un sinfín de maneras de cuartar la libertad del hombre, maneras que, en gran medida, se han utilizado violentando los derechos de las personas y siendo causa de violencia en la sociedad.

Es cierto que hay varias situaciones en las que la persona pierde el control de su libertad y que puede llegar a ser un medio de alteración social. Sin embargo, aun en situaciones extremas en torno a la movilidad humana se deben siempre respetar los derechos de la persona. En cuanto a los derechos humanos la sociedad ha avanzado mucho, puesto que existen una serie de medias e instituciones que tienen ese encargo a nivel mundial.

Pero a pesar de que hay muchas maneras de defender los derechos humanos, aun se siguen violentando con muchas medidas sociales, algunas legalmente y otras de manera ilegal.              

Varias maneras de cuartar la libertad ilegalmente por mencionar algunas, son los secuestros, la trata de las personas, la violación infantil, la explotación infantil en el trabajo, la corrupción que manejan las ideologías actuales y de manera grave y alarmante la movilidad humana con la migración. Pero a pesar de que muchas de ellas son ilegales, otras tantas maneras de cuartar la libertad ilegalmente, se realizan a la vista de todos, bajo los argumentos que son en beneficio de la sociedad.

Es triste mirar nuestra sociedad vulnerada por tantos intereses “mundanos”, que no valoran la dignidad humana y que, en situaciones muy graves, se aprovechan de la inocencia de las personas para hacer su agosto de la misma situación. Es increíble, que nuestras mismas instituciones encargadas de velar por la libertad, en momentos se vuelcan sobre las personas, motivadas por otros intereses egoístas y mezquinos.

Así encontramos muchas barreras sociales, que se oponen a la libertad de la humanidad. Las personas se trasladan de una ciudad a otra o de un país a otro buscando mejores oportunidades, donde puedan obtener un trabajo que les solvente los gastos de la vida diaria y que les brinde mejores situaciones para su familia.

El caso más actual es la migración de millares de personas de países de Sudamérica que pretenden llegar a situaciones que mejoren su estado de vida. De esta realidad, no solamente deberíamos centrarnos en que los migrantes buscan llegar a los Estados Unidos, sino las intenciones de su caminar y la manera en que van arriesgando su vida para alcanzar ese sueño. Debemos ser conscientes del escenario de donde están huyendo y de las razones por los cuales salen de sus países, en busca de la libertad. Libertad para trabajar, para estudiar e incluso libertad en decidir y vivir libremente gozando de las bondades de la vida.

Finalmente debemos ser conscientes del sin fin de barreras sociales que impiden vivir libremente esta vida. Muchas de ellas pueden ser derribadas fácilmente, otras no dependen de nuestras acciones, pero debemos hacernos el propósito de no ser parte de esa manera de esclavitud social y debemos tomar la bandera de la libertad, desde nuestras palabras y nuestras actitudes en la sociedad.

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