Política en lo oscurito
Política en lo oscurito
El show debe continuar
Don Cedano nunca ha pretendido ser algo que no es, ni siquiera simularlo. Miente, sí ha querido ser algo más; pero no se puede decir, porqué heriría susceptibilidades. A lo mejor aspiraba a tener reconocimiento mundial por sus obras, de cualquier tipo, o algo que lo hiciera tener reflectores. Eso fue en la juventud. En la infancia no tenía tan claro el panorama del comportamiento humano, así que solo pretendía vivir. Porqué la infancia, a pesar de las dificultades, fue una etapa fructífera, nos dejó amistades, que a pesar de la distancia continúan siendo las mismas.
Más los años se le fueron juntando y la fama llegó de otra manera, llegó sutil, despacito, se deslizó por debajo de la ventana y ya no la quiso. Estaba tan acostumbrado a estar solo, que toda atención le molestaba, se fue retirando despacio, alejándose de la farándula, ya ni las promesas de “huesos” lo hacían desprenderse de su tranquilidad. Le había costado mucho sustraerse de sí mismo, como para que vinieran los faneses a solicitar firmas en sus camisetas mojadas transparentando sus voluptuosidades, ya no está para esos trotes. Bueno, si lo está, pero ya no vienen, ja.
Les decía… antes de desviarme en otro tipo de fantasías… que Don Cedano buscaba el reconocimiento y lo ha logrado, mi padre me reconoce. Así que están bien representados todos aquellos que por pena no me lo dicen, que son muchos, por ejemplo, mis siete lectores, que si les pidiera diezmo me lo mandan, primero me mandan al carajo. Lo sé, pero no voy a ir, para que ni lo intenten, por si las dudas.
Los que, si deben tener reconocimiento, son todas aquellas personas que han apoyado a las familias de Acapulco y los que siguen apoyando. Es allí, donde la entrega y el amor al prójimo se deben demostrar. No queremos que vayan políticos a sacarse la foto encima de un vehículo. Que vayan con herramientas, con personas, con sus manos a retirar todo lo que antes fue útil y que ahora es basura. Así se siente la empatía.
El discurso, cuando no se sostiene desde la acción es falacia, es una mentira. Eso debe ser desterrado, porqué muchos medran con el dolor ajeno, se aprovechan de las desgracias para buscar algo que no les pertenece, como la legitimidad política, que tiene un objetivo: vivir del dinero que se nos quita mediante impuestos, diría que se nos roba, porqué vemos que su uso es más para pago de los gastos de campaña, y nuestro prejidente ha estado en campaña toda su vida, y se lo hemos pagado, aunque él diga que se lo paga el partido.
El dinero del partido son nuestros impuestos, los sobres amarillos, los paquetes con ligas, siguen saliendo de nuestros impuestos, aunque diga que son donaciones. Todas las deudas se pagan, algunas con contratos, y todo sale de nuestros impuestos. Ellos no generan, ni para ellos, ¡Ya me estoy enojando! Y debo ser un ser de luz, pacífico y tranquilo, me lo prometí, a mi edad o me da un infarto o me deja parapléjico la muina, pero es que los de nuestro gobierno no ayudan, ni a Acapulco que está dañado.
A lo mejor los fideicomisos cancelados era una previsión para ayudar a los damnificados y uno apoyando a la oposición para que no destruya al poder judicial, y en una de esas es para un bien superior, ja, ja, ja… sí, ni yo me la creo. Los políticos no tienen fines sociales, tienen intereses y el estado es la empresa, solo buscan la dirección que les garantice prebendas y poder… bueno, el poder les garantiza recursos casi ilimitados, porqué una persona normal no se los acabaría, imagínense, todo el dinero que tiene Alito, repartido entre la población, bien podrían sacar de la pobreza a algunos miles de personas. Súmenle la de todos los políticos, aun los austeros de La Prieta, esos que se hacen la boca chiquita, y de bolsa grande, ja.
México sería rico, estaría mejor posicionado, pero no, los políticos solo ven por ellos, no por la población. Las personas solo son medios para conseguir su fin. Por eso me molesta tanto el discurso de amor hacia la población, cuando no va seguido de una acción de equilibrio. Debería llegar de inmediato todo el aparato de gobierno a limpiar, a remover, a sanar, a curar, a alimentar, a vestir a la población, para eso está. Pero no, buscan que la población misma se ayude y con esa ayuda ellos justificar su trabajo, que sería repartir.
Todavía recuerdo el gobierno austero de Bedolla, allá por el 2021, prometiendo austeridad. Lo vi en campaña, con camionetas decentes, algo austeras, y lo vi a las pocas semanas de asumir el cargo en camionetas nada austeras, muy rápido las compraron, como si las tuvieran listas para él, y desde luego, él no las pagó, las pagaron los michoacanos. Ya ven que de inmediato metieron el reemplacamiento, sin saliva, ¡Charros! Todavía duele el orgullo, y la bolsa, uno se esfuerza y el esfuerzo se va en mantenerlos.
Siento algo de coraje, porqué más del 35% de mi tiempo de trabajo lo hago para el estado, y el estado no veo que haga poco por mí, ni siquiera puede construir carreteras de calidad, y lo entiendo, en los moches se va la calidad, las firmas cuestan y siempre hay artilugios para justificar todo lo que queda oculto. Lo que no ocultan, es la empatía del pueblo, la solidaridad, creo que si nos dejaran solos estaríamos mejor, podríamos administrarnos eficientemente.
Bueno, si no podemos modificar nuestro sistema de elección, difícilmente nos podríamos administrar, estamos tan acostumbrados a papá gobierno, que creemos que necesitamos siempre alguien que nos guie. Así no sabríamos elegir en que invertir los recursos y terminarían siendo repartidos entre todos, ja, como ahora, poquito para la mayoría, mucho para la minoría. Algo así como la ley de Pareto, el 20% de los recursos se reparte entre el 80% de la población y el 80% de los recursos entre el 20% de la población. Ya saben ustedes de qué lado queda ese 80% de los recursos.
Dicen los memes, que no se los diré, pero habrá señales; como, por ejemplo, ir haciendo campaña sin tener un ingreso oficial, y no hablo de Sheinbaum, no, ella tiene ahorros, ni de Xóchitl, ella tiene empresas, y tiene también discurso de competencia ante Claudia, ninguna es buena, pero es lo que hay, ya ven que tendremos que elegir, de lo que ya eligieron los grupos de poder.
Podrían bien elegir a Don Cedano, pero les da miedo perder sus privilegios, como los diputados y senadores que ya andan moviéndose para cambiar de cámara o para reelegirse o para acomodarse en alguna secretaría, ya ven que no saben trabajar, solo saben vivir del trabajo ajeno. Pero habrá justicia divina, no lo duden. En algún momento de la historia del hombre, que ojalá la vean estos ojos, los políticos mendaces recibirán su merecido, porqué hasta ahora lo que reciben no es por merecimiento:
¿Y si, sí lo merecen?, estaríamos en problemas, porqué nosotros también merecemos al tipo de gobierno que tenemos. Así ya hace sentido la frase de que los pueblos tienen al gobierno que merecen, ¡Changos!, merecemos muy poco, ja.
Nuestro prejidente se la pasa enojado, como si tuviera alteraciones psicológicas, y nadie le dijera de su problema de labilidad emocional, y nos juzgamos a nosotros, creyendo que estamos mal, cuando tenemos razón en ambas cosas, que estamos mal, gobierno y pueblo… espero que al menos sí recupere Acapulco su vida “normal”, no la de antros, sino, su cotidianeidad, su alegría, y que les quiten a los narcos que afean la relación social, que cobran derecho de piso y no dejan entrar mercancías sin pago de ese doble impuesto, el del gobierno y el de los malos, ya bastante han sufrido.
Vamos a mandarles algo de comida y alguna plegaria u oración, no sé cuál funcione, por si las dudas hagamos las tres cosas, alguna les hará bien. Diría, ya no mandemos comitivas oficiales, esas solo quieren agua para su molino, no dan paso sin huarache.