Acusan transgresión a derechos de estudiantes del CBTIS

Son obligan a comprar curso de regularización cuando reprueban.

A lo anterior se suma que las cuotas de inscripción han incrementado notoriamente.

Por: Gabriel Gómez Rodríguez

H. Zitácuaro, Mich.- Padres y madres de familia que tienen a sus hijos en el CBTIS, plantel Zitácuaro, informaron que la institución cuenta con un profesor del idioma inglés, que se caracteriza por no aprobar a un porcentaje de sus alumnos y luego el docente les vende un curso para regularizarlos.

Entrevistados por “El Despertar”, optaron por denunciar lo anterior de manera anónima, para evitar represalias en contra de sus hijos. Expresaron que hay algunas irregularidades en esa institución, entre ellas, que el profesor de inglés, quien tiene varios años impartiendo esa materia. A la hora de hacer los exámenes muchos reprueban.

Su objetivo con los aprobados es confirmar que su sistema de impartición de clases y sus evaluaciones son las adecuadas.

Mencionan los inconformes que por lo menos se lleva medio grupo reprobado y luego les invita a participar en un curso de regularización. Pero ese curso tiene un costo económico, a algunos de los estudiantes les vende la idea de que le den la cantidad de 200 pesos para “apartar el lugar” y no reprobarlos en el semestre.

“Imagínate, el maestro les cobra una mensualidad y hay que pagar. Cuidado con que no vayas, porque los detecta y se los agarra de bajada. Cuidado con que digamos algo, porque ese maestro sí agarra represalias en contra de los alumnos”, expresaron los quejosos.

“Nos tienen en esa escuela con el pie en el cuello por la materia de inglés. Porque si investigan, la mayoría que deben alguna materia, es la de inglés. Por ejemplo, en un semestre pasa a medio grupo y al siguiente, pasa al otro medio grupo”, subrayaron.

“Así se la va llevando, unos en el primero, otros en el segundo (semestre) y cuidado con que alguien diga: yo no voy a su curso, porque se los agarra de “bajada”.

Pese a que los padres y madres de familia han denunciado el hecho ante los directivos, la respuesta que han obtenido es que no está en sus manos resolver tal situación. Les han cerrado prácticamente las puertas.

Anteriormente ese docente impartía clases en el Conalep de Zitácuaro y en esa escuela no tenía permitido reprobar a sus alumnos, la regla era aprobarlos. Pese a que algunos no tuvieran calificaciones aprobatorias, la indicación de la institución era aprobar a los estudiantes.

El mismo profesor admitió que había laborado en el Conalep y no estaba de acuerdo en “regalar calificaciones” a los alumnos de bajo rendimiento escolar.

Otra de las inconformidades, es que actualmente tienen que pagar una cuota de mil 900 pesos, cuando en el semestre anterior les cobraron mil 500. Mil 400 por concepto de cuota de aportación, incluye aportación adicional (sanitarios), 400 por costo de ficha y 100 pesos por reposición de credencial.

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