Cumplirá 44 años de servicio como educadora

Es docente en la primaria “Eva Sámano de López Mateo”.

De niña caminaba más de 10 kilómetros para poder llegar a su escuela.

Por: Gabriel Gómez Rodríguez

H. Zitácuaro, Mich. – Próximamente estará por cumplir 44 años de labor como educadora, en la escuela primaria “Eva Sámano de López Mateos”. A ella la conocen como la maestra Marianita, una mujer entusiasta, responsable y entregada a la preparación académica de sus alumnos.

Recientemente tuvo la visita de un supervisor de educación primaria a su aula de clases y el directivo sostuvo una charla con los alumnos del tercero “C”, del turno matutino, de esa escuela primaria.

Ambos docentes platicaban que, de niños, desde las 5 de la mañana estaban de pie, para poder llegar a sus escuelas.La educadora indicó que ella tenía que hacer una trayectoria de 10 kilómetros a pie para poder llegar a la primaria “Niños Héroes”, ubicada en la calle de Morelos esquina con Mariano Matamoros.

Ella nació en el lugar conocido como La Palma, comunidad ubicada por la Presa del Bosque, perteneciente al municipio de Zitácuaro.

Precisamente el viernes 10 de marzo la profesora recibió algunos obsequios y un ramo de flores por parte de algunos alumnos y padres de familia con motivo de su cumpleaños.

En entrevista con “El Despertar”, indicó que al fallecer su madre se refugió con sus abuelos maternos, a ellos les ayudaba en las labores del campo, como escardar, sembrar y cosechar.

También hacía los quehaceres de la casa, como lavar en el río la ropa y los trastes de cocina, actividades que hizo desde los cuatro años de edad.

Consideró que un gran error de los padres de familia, es dejar a los menores con los celulares para que se entretengan. Ya que esta no es una manera de enseñar o educar. 

En los tiempos actuales los padres y madres les brindantodas las comodidades a los hijos y los hacen más dependientes a ellos.

Explicó que ha conocido a mujeres que desde las 7 de la mañana trabajan y terminan sus jornadas laborales hasta las 7 de la noche. 

Por ejemplo, una madre de familia que llegaba únicamente a descansar y su hijo le ponía una tina de agua con sal y vinagre para que ahí pusiera sus pies, para aliviar su cansancio.

Estas son algunas de las historias de la maestra Marianita que le provocan entusiasmo, ya que cuando se trabaja con mucho esfuerzo y sacrificio se valora más lo que se tiene.

Recientemente en clase, a sus alumnos les habló de la contaminación del medio ambiente y les exhortó a no tirar desechos en las calles, depositar la basura en recipientes, cuidar el agua y plantar un árbol.

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