Niegan que haya mala aplicación de recursos en Jardín de Niños.

Zitácuaro. –  Luego de la queja pública que hicieran algunas madres de familia, respecto a supuestos cobros indebidos en el Jardín de Niños Valle de Quencio, las directoras de ambos turnos y la mesa directiva del mencionado kínder dieron a conocer las cifras de lo que ingresa y egresa de dinero en la escuela, negando que se haga mal uso de estos recursos.

En entrevista con las directoras y miembros de la mesa directiva de padres de familia, informaron que la cooperación de 30 pesos fue como se dijo, para reparar la cisterna. Misma que era urgente corregir, debido a que el agua se trasminaba a un salón que colinda con el tanque y desde hace años tenía este problema.

Dolores Cuero Salgado, directora del turno vespertino, explicó que sí se les pidió la cooperación de 30 pesos por niño, pero no se les dio un boleto para la matiné, ya que este tenía un costo extra de 30 pesos; por lo tanto, serían 60 pesos que los padres de familia tendrían que desembolsar y conociendo la situación económica de las familias que llevan a sus niños en la tarde, se tomó la decisión de que sólo fuera la cooperación para reunir el dinero que solventara el gasto de la reparación, misma que tuvo un costo de 15 mil 500 pesos.

De 96 padres de familia del turno de la tarde, sólo 76 dieron la cooperación, haciendo un total de 2 mil 280 pesos. Fueron los de este turno los que aportaron más para la reparación de la cisterna, logrando juntar 12 mil 300 pesos. Aun así, falta un poco más para juntar el dinero y pagar al albañil que hizo el trabajo de reparación.

El día de la entrevista, las directoras y miembros de la mesa directiva dieron a conocer a los padres del turo vespertino los gastos que erogó el arreglo de la cisterna, mismos que se encuentran definidos en un libro de corte de caja, así como en un talonario foliado que demuestra las aportaciones que cada padre de familia hace a la escuela. 

La entrega de cuentas se hace cada tres meses y aclararon que toda actividad se hace consensuada con los padres de familia y la mesa directiva, para evitar este tipo de problemas. Y es que, las quejosas dieron a conocer que la institución les vendía de manera obligatoria las pulseras con la imagen de la Cruz Roja, situación que no es exclusiva del kínder Valle de Quencio, ya que estas pulseras se entregan a alumnos de todos los niveles educativos.

Griselda García Yáñez, miembro de la mesa directiva, explicó que es falso que las entreguen de manera obligatoria, ya que es decisión de cada persona si la compra o no. En este kínder se dieron un total de 150 pulseras, 100 para el turno matutino y 50 para el vespertino. Así mismo expusieron que no sabían exactamente la manera en que la SEP las reparte a las coordinaciones, para que estas las entreguen a las escuelas, pero esto es un tema propiamente de la SEE.

Finalmente aclararon que la cooperativa la tiene a cargo una persona que nada tiene que ver con la directora, la cual estuvo sola por un tiempo, ya que no había nadie que se quisiera hacer cargo de la misma. Los padres de familia ahí reunidos señalaron que la comida de los niños es variada y no siempre se les da un mismo menú, como lo habían denunciado, ya que  son las mamás que van a dejar a sus hijos al kínder las que deciden que les den de comer a la hora del desayuno y en algunos casos hasta fruta y agua les dan.

En un recorrido por las instalaciones, incluyendo el salón que pega con la cisterna, se pueden observar los daños que el agua había ocasionado. Aunque ya el aplanado se cambió, algunas paredes aun muestran los rasgos de la humedad. Las directoras reconocieron que la escuela necesita más arreglos, pero desafortunadamente no hay los recursos suficientes para hacerlo.