Personaje de la Semana

Abel Medina Solís, el artista, el autor del mural de Zitácuaro

Zitácuaro, Mich.- Abel Medina Solís fue un estudioso de las artes y su formación académica la realizó en la   Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM. Su obra maestra fue la realización del mural de Zitácuaro, que se localiza  en los patios de la Presidencia Municipal, en ella se resume la historia de los habitantes de la tres veces heroica.

Abel Medina, aunque nació en la población de Jungapeo, Michoacán, vivió en Zitácuaro su niñez y juventud. Estudió en la primaria Francisco I. Madero, posteriormente viajó a la ciudad de México para incorporarse a la Escuela Nacional de Artes Plásticas. Fue, además de pintor, el fundador del Jardín del Arte de Zitácuaro, con la colaboración de otros distinguidos zitacuarenses, como el maestro Jesús Solórzano Sánchez.

Para la elaboración del mural tuvo el pensamiento del historiador zitacuarense Genaro Correa Pérez y el apoyo de su entonces alumna Azucena Heredia. Abel Medina había puesto la idea de hacer un mural en el periodo en el que gobernaba el Arq. Roberto Herrera Medina, sin embargo fue hasta el periodo del entonces alcalde J. Ascensión Orihuela Bárcenas donde finalmente fue cristalizado dicho proyecto. En el mural aparece como escena central la instalación de la Suprema Junta Nacional Americana (de Zitácuaro).

Dentro de las obras de Abel Medina se menciona que algunas de ellas fueron muy relevantes y se exhibieron tanto en el interior del país como en el extranjero, así que se le conoce como un “destacado pintor michoacano”. Luego de que en 1953 el “Mineral de Angangueo” tuvo una tragedia en sus minas, décadas después el pintor Abel Medina plasma este suceso en sus manos y le da su toque artístico, dicha pintura es propiedad del Dr. Edel Colín Rojas.

Al maestro Medina le gustaba pintar paisajes, algunas otras cuentan con contenido social, además también realizó algunos retratos. No se puede pasar por alto que también fue el ganador para la creación del escudo municipal en el año 1984. El escudo hace referencia al verde, el cual significa esperanza, abundancia y libertad, se encuentra un arco, el cual hace referencia a la entrada al Estado de Michoacán, aparecen al fondo el cerro Pelón. Posteriormente aparece el Cerrito de Independencia y al fondo el Cerro Cacique, aparece también un sol naciente con rayos que abrazan ambos cuarteles.

“Con él aprendí la talla, la pintura, algo de vitral, del cual yo aprendí lo relacionado al arte, otra de mis mayores experiencias fue haber participado con él (maestro Abel) en el mural de la presidencia”, expresó Azucena Heredia. Al tiempo de señalar que “fue para mi una experiencia muy grande, fue mi primer trabajo. Para estar ahí con él hicimos un ejercicio de pintura al fresco, donde era su taller, su casa, ahí pintamos un cristo en la pared, el propósito fue aprender la técnica. Él decía que (yo) tenía aptitudes para esto”, añadió. Fue un mes de marzo cuando se iniciaron los trabajos del mural y culminaron un 5 de febrero, fecha en el que el entonces gobernador de la entidad era el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas.

Cuando Abel Medina tenía en sus manos los trabajos del mural de Zitácuaro no antepuso sus intereses monetarios; por el contario, el trabajo lo hacía con mucho cariño y entusiasmo, lo que más importaba era dejar un legado al pueblo de Zitácuaro y llevar a cabo el rescate de los valores históricos.

Medina Solís, además de ser pintor, también realizó otras actividades artísticas, como la talla y grabado de madera, así como el dibujo a lápiz, el retrato y el modelado. Siempre al servicio de los zitacuarenses le nace la idea de fundar una agrupación de enseñanza de actividades artísticas y fundó el Jardín del Arte. El Jardín del Arte ha inducido a cientos de zitacuarenses  para aprender los valores artísticos.

En el periodo de la alcaldesa Lourdes Jiménez Coronel se le rinde un homenaje al desaparecido zitacuarense, se le recuerda como una persona sencilla, que “daba todo por enseñar y sin guardarse nada para sí”. Uno de sus pasatiempos preferidos era escuchar música clásica y tenía su taller en la calle Guadalupe Victoria, a un lado de la Iglesia de San Juan Bautista.

El historiador Miguel Ángel Avilés menciona que la obra del mural “es la más importante de las que forman parte del patrimonio histórico de Zitácuaro”, dicha obra esta plasmada en el muro norte del patio principal de palacio municipal.

Abel Medina Solís murió en un accidente el 24 de febrero de 1993 en el estado de Aguascalientes.

Nota: gracias por leernos a nuestros asiduos lectores de “El Despertar”, hasta la próxima.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *