Andrés Landa y Piña

H. Zitácuaro, Mich. – Andrés Landa y Piña nació en la población de Jungapeo, el 10 de abril de 1895. Se convirtió en secretario del ayuntamiento de esa localidad y tiempo después este mismo cargo lo desempeñó en la administración municipal de Zitácuaro.

El presidente de la república, Álvaro Obregón, arribó a esta ciudad y en su estancia escuchó un discurso de Andrés Landa y Piña, en el cual notó que tenía una oratoria excepcional y algunas otras cualidades, por lo que, lo invitó a colaborar en su gobierno.

A pesar de la muerte del general Álvaro Obregón, esto no fue motivo para que Andrés continuara avanzando en su carrera política y administrativa, se menciona que contaba con una férrea voluntad y un talento sin igual.

Para el año de 1928 fue nombrado jefe de la Sección de Estadística del Departamento de Migración, dependiente de la Secretaría de Gobernación. Como titular de esta oficina realizó trabajos de reorganización y en la misma permaneció por varios períodos presidenciales.

Su capacidad creativa, de estudio y de análisis permitió que Andrés canalizara de manera óptima los problemas migratorios, para lo cual muchos de estos procedimientos y formas siguen vigentes.

En aquella época era una de sus principales consignas dar atención digna a indocumentados, por lo que en ocasiones les conseguía incluso empleo, becas de estudio, ayuda médica, así como asesoría legal o financiera.

Muchos michoacanos veían en él a un buen amigo; ya que, además su casa, que tenía en la Ciudad de México, servía para dar hospedaje a un gran número de personas que llegaban a la capital del país en busca de mejores oportunidades de vida.

Landa y Piña fue precursor de la creación de lo que actualmente es la Secretaría de Turismo. El 17 de diciembre de 1928 se le encomendó trabajar en la organización del Comité Pro Turismo en nuestro país, tarea que finalmente concluyó con éxito.

De tal manera que, en junio de 1954, fue nombrado como Jefe de la Delegación Mexicana para participar en el V Congreso Panamericano de Turismo, realizado en Panamá, en donde se le consideró huésped distinguido en aquel país.

Andrés se esforzó por dar a conocer y proyectar las bellezas naturales de México y de manera particular lo hizo con los paradisiacos sitios de Michoacán, así como a nivel regional, Zitácuaro, Ciudad Hidalgo y Jungapeo, entre ellos tampoco podía faltar el de  San José Purúa.

Fue también titular de la Dirección General de Población, puesto en que se desempeñó con eficacia, lo que le valió se le reconociera su labor, al grado de que asistió a la ciudad de Nueva York, como representante de nuestro país y asistente a la convención efectuada en la Organización de las Naciones Unidas, en febrero de 1961.

Con el presidente de la república, Lic. Adolfo Ruíz Cortines, tuvo una estrecha relación, por lo que fue invitado a participar en el Registro Nacional de Electores, realizando tareas de organización y funcionalidad. Como resultado de su trabajo el gobierno instauró la credencial de elector.

Tuvo algunos reconocimientos a nivel internacional, como lo fue la distinción del gobierno francés, al otorgarle el premio Las Palmas Académicas. Fue considerado Andrés Landa y Piña una persona honrada y sencilla, además de brillante como servidor público.

Falleció a la edad de 74 años, siendo el director del Registro Nacional de Electores. Por cierto, una de las calles de esta ciudad lleva su nombre, la misma se encuentra en la parte oriente.

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