Despertar de la tierra

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Despertar de la tierra

La rueda del Samsara y las moiras
Las moiras, las malvadas brujas, tienen un trabajo a nuestra vista desagradable, su tarea es cortar el hilo de la vida de las personas, estas tres mujeres, o seres, se encuentran en lo alto de los cielos, en algún lugar extraño y fúnebre, nos la imaginamos como seres sin sentimientos, porqué solo los seres sin alma son capaces de quitar el aliento a los humanos. Sin embargo, en la raza humana hay muchos que pareciera trabajan de la mano con ellas, o son mandados por ellas, porqué quitan la vida al por mayor, como por ejemplo las mafias, que se meten en una guerra intestina entre ellos mismos, para ver quien mata mejor.
Mientras eso pasa, veo a las moiras echadas en su hamaca, con un coco en la mano, y con sus largas uñas del pie meciéndose, pues su trabajo está bien delegado, imaginenese entre los narcos, los policías, la industria farmacéutica que no se hace responsable de los daños que causen a la salud los productos que venden “legalmente” y entre la industria de los alimentos, la tarea de estas brujas se limita a aquellos pocos seres que están fuera de la rueda del Samsara o rueda de las encarnaciones, la tarea se la hacen sencilla y más en estos días, cuando las personas están muriendo por miles por razones aún no establecidas por la ciencia.
En el argot tradicional se dice que se están muriendo “repentinamente” y ya no está respetando estatus socioeconómico, ni fama… bueno, eso nunca lo ha respetado, pero hoy, hay muchos personajes de la vida pública que están muriendo de manera inesperada, otros de manera esperada, pero siguen siendo muertes, señales de un nuevo tiempo. Buena justificación para aquellos amantes de los temas ocultos y amantes de la conspiración, ¿Se imaginan el trabajo que tienen hoy los científicos tratando de justificar tantas muertes después de haber adulado la bondad de las vacunas?
Mientras los conspiracionistas relamiéndose los bigotes ante tanta incongruencia, un día te dicen que vacunándote estás protegido, y ya vacunado te sientes confiado y cómodo, pero un día después te dicen que no es suficiente la vacuna, que a pesar de ella, sigues estando en riesgo de muerte por el virus, pero que solo te ayuda a no tener que ingresar a un hospital, pero que si no te cuidas, podrás hacerlo de la misma manera que una persona que no está protegida; ¿Dónde está la ventaja?, ¿En no morir en tan malas condiciones como lo anunciaban antes? Y ahora, para protegerte más, necesitas un refuerzo, que te protege más de aquellos que no se vacunaron, que siguen siendo los menos y que siguen muriendo los menos.
Otra de las incongruencias es que los vacunados deben cuidarse de los no vacunados por riesgo de infección, ¿Acaso no sería más peligroso para un no vacunado el acercarse a cualquier ser?, si no está protegido, corre riesgo. El vacunado no debería temer, ya está “protegido”, o al menos eso nos venden.
Algo raro hay en todo eso, pues en Gran Bretaña, ya hay mas claridad en lo que significa el pasaporte Covid, es un nuevo impuesto, o una nueva forma de hacerse de recursos mediante el. En Gran Bretaña puedes ir y comprar un pasaporte Covid, por unos euros, así puedes andar por toda Europa tranquilamente sin vacunarte, pues no te piden constancia de vacunación, solo una identificación y el pago. Puede ser que, dentro de poco, algún país menos comprometido, por no decir Panamá en el continente americano, venda pasaportes Covid, sin necesidad de comprobar estar vacunados, y todos podremos viajar.
Es buena estrategia de los gobiernos para mantener cierto control y poder seguir moviendo el mercado, los cautivos de las vacunas ya no podrán salirse, si por algún momento lo intenten, siempre habrá una nueva cepa más peligrosa y poderosa que la anterior, y mucho más mortal, aunque se sospeche que la epidemia de muertes repentinas sea producto de las mismas campañas de vacunación y que seguiremos anunciando obituarios por varios meses aún. Si no creen, analicen las noticias de muertes de manera local o regional, no se vayan a estadísticas nacionales, pregunten al vecino, al amigo, al conocido, al compañero o vean los noticieros o paginas locales y encontrarán que se siguen muriendo, pero ya sin el reflector.
Aunque hay intentos algo tímidos de llevar un conteo de los casos de muertes repentinas, aun no se tiene una estadística fiable, pero al menos te da idea de la magnitud, ya se reportan este año, a partir de junio, que la muerte ha estado llevándose a personas públicas de manera repentina, 72 deportistas en la lista, y localmente, podríamos constatar al menos 3 muertes repentinas en menos de dos meses, en un poblado de escasos dos mil habitantes, ¿Ya no reportan esas muertes por no estar atribuidas al Covid?, y tendrán razón, no existe algo que los una en línea recta, ¿Pero qué tal a consecuencia de las reacciones secundarias tras haberse inyectado algo que está en fase de experimentación, y que nada tiene que ver con las vacunas tradicionales de virus atenuados?
Ahora se llaman ARN mensajeros, que es una modificación genética que no aceptan o justifican más el beneficio que el perjuicio, sin embargo, aunque se justifique moralmente, o en la dialéctica, no creemos que sea la solución el seguir vacunando con una sustancia que caduca muy rápidamente y que no es ciento por ciento confiable, pues cada cierto tiempo vas a tener que estarte vacunando para estar protegido, suena más bien como a generar una dependencia crónica a las vacunas, así no te mueres rápido, pero si te mantienes consumiendo o comprando vacunas cada año, así como las de la influenza, que ya se convirtió en esquema.
De esa manera ya eres cautivo, de esa manera nos mantienen dándole vueltas a la rueda del Samsara, que se convierte en algo recurrente y predecible, trabajo sencillo para las moiras, que en estos días se han vuelto hacendosas.
La tierra se está moviendo de manera grata, fuentes de energía brotan por todos lados, para que los evento naturales se manifiesten en todas las regiones del mundo, hace unos meses las inundaciones estaban fuertes en Asia, principalmente India, China y Turquía, después pasaron a Europa, en Alemania, Austria, Francia, España y Portugal, después se fueron a América del norte, hoy están pegando en Brasil en el sur del continente, mientras que las heladas están llegando tarde, el clima es muy cálido a como estábamos acostumbrados en años anteriores en estas fechas, tan cálidos, que los tornados se volvieron “inusuales” en Estados Unidos en estas fechas, llevando su carga mortal, tal y como debiera suceder al modificarse todos los patrones climáticos mundiales.
La muerte es la única democratizadora de todas las políticas, de todas las reglas, de todas las excepciones, de todas las clases, esa está lista, las moiras despiertas, la rueda del Samsara echando humo por la rapidez con la que trabaja, mueren famosos, producto o no del miedo al virus, producto o no del miedo a la pobreza, producto o no del miedo a la propia muerte, al final se están muriendo famosos, no famosos, pobres, ricos, la muerte no discrimina, ella de la mano de las tres misteriosas brujas, son las que están llevando el derrotero designado para los hombres de la tierra.
Moiras significa repartidoras, personifican al destino, los romanos le llamaban Parcas o Fatae, en la cultura Báltica se llamaban Laimas, en la cultura Nórdica se llamaban norma, todas ellas, tres unificadas, son dueñas del destino de los hombres, las tres al servicio superior de la tierra. Dicen ahora, que el lote, porción o tiempo de vida de millones de personas ha caducado, ha llegado a su fin y tendrán que irse en grupos grandes, vemos con claridad el porqué las muertes se suceden en grupos, las almas se acercan, se unen y mueren, en un holocausto predestinado, grandes madejas se deshilan, el humo de la rueda del Samsara seguirá y seguirá por varios años, antes de que el cambio de la tierra sea completado.

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